El pasado viernes, 18 de junio, Babylon Teatro escenificó en el espléndido auditorio Pilar Bardem de Rivas Vaciamadrid el drama carcelario Cuando no ves la luz. Como se sabe, el espectáculo se enmarca en el contexto de la V Muestra de Teatro Aficionado de la FETAM. La historia, escrita y dirigida por el joven actor, director y periodista Hernán Brave, despliega un abanico de situaciones atractivas que contiene ciertas aristas dignas de mención.
Por su parte, Cuando no ves la luz -turbia aventura de tensión y emoción-acontece en un centro penitenciario para mujeres. Todo parece normal: unas entran, otras salen y otras saben que esta será su casa hasta el final de sus días. Sin embargo, Julia, una de las presas más respetadas y problemáticas, va a recibir una noticia que trastocará su mundo, la de sus compañeras de celda (Manuela, ‘La princesa’ y ‘La babas’) y la de dos de las funcionarias: la autoritaria Matilde y la dulce Adela.
El espectáculo da comienzo en la grada, mientras se acomoda el público. Las dos funcionarias de la prisión controlan el acceso del respetable al interior de la penitenciaría, teniendo que ‘emplearse a fondo’ con algún gancho espontáneo, en una acción metateatral bien lograda en su forma -estética y audiovisual- que preludia los siguientes sucesos. Dicho recurso resulta un buen valor añadido a una puesta en escena que destaca por sus cualidades escenográficas.
No obstante, aunque se muestran dos ambientes visualmente muy atractivos, el espectador no los recibe con total nitidez. Sería recomendable, por un lado, resituar el mobiliario y abrir el espacio escénico (el interior de la celda) donde se cuece la entraña de la historia; por otro, potenciar la luz en algunas acciones especialmente representativas del drama.
Sin embargo, y a pesar de estas leves consideraciones, el resultado final de Cuando no ves la luz es muy bueno. Goza de un montaje bien engrasado -tanto por el ritmo de la historia como por su tempo dramático-, a lo cual contribuye decisivamente el trabajo interpretativo del elenco, con personajes bien definidos y actores que saben estar a la altura de sus circunstancias, sobre todo por lo que la pieza les exige a todos a cada rato.
Nos hallamos, pues, ante una buena propuesta teatral que, con algunos ajustes, puede dar mucho más de sí.
José Luis Panero
V-MUESTRA-DE-TEATRO-AFICIONADO-DE-LA-COMUNIDAD-DE-MADRID.pdf
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